A través del tiempo la educación se ha visto inmersa en
distintos cambios que la han ido modificando y mejorando a través de los años, todo profesor
que ejerza y se prepare para esta profesión en este siglo debe tener claro que los
docentes deben poseer ciertas características que les permitan desenvolverse de
manera efectiva en las salas de clases, además de cumplir con las demandas profesionales
a las que se verán enfrentados y más importante lograr un desarrollo efectivo
en la sociedad y tener en cuenta que hoy en día el docente más que enseñar la asignatura
y pasar la materia debe dotar a sus estudiantes de habilidades que les permita
la construcción de saberes para su vida personal.
Una de las características más importantes es que el docente
se encuentre preparado para poder enfrentar un entorno que está en constante
cambio, por lo tanto debe generar una buena disposición para las constantes
modificaciones que va sufriendo el entorno que cada vez se globaliza más, de la
misma forma debe estar dispuesto a aprender cosas nuevas y estar actualizándose
constantemente, además debe ser flexible, ser capaz de innovar y lograr incorporar
los avances tecnológicos en sus clases.
La forma en que realiza la clase debería estar basada en los
intereses de los alumnos para así mantenerlos motivados y logar generar una educación
y un ambiente en el aula que esté basado en las relaciones personales, es decir
de respeto mutuo, que los alumnos se sientan con la confianza de conversas
temas de acuerdo a la asignatura y también temas personales que los inquieten, del
mismo modo debe generar la capacidad de poder realizar trabajos cooperativos
con sus demás pares para conversar los problemas que aquejan a los curso y
desarrollar soluciones para ellos además de tener en cuenta las fortalezas y
debilidades de cada estudiante y trabajar en ello en conjunto con la comunidad
educativa. Las clases deben contar con actividades interactivas y motivadoras
en donde los estudiantes se vean en la necesidad de utilizar sus conocimientos,
ser creativos y participantes activos.
Los valores y la ética son otros puntos de mucha relevancia
que un profesor debe cumplir ya que ser docente se convierte en un ejemplo, una
guía, un modelo a seguir en donde los estudiantes se pueden sentir identificados
e interesados por lo que se debe brindar una buena impresión, un buen ejemplo, mostrar
y generar en los alumnos valores solidos que los ayuden en su formación como
persona, de la misma forma el comportamiento de un docente debe ser intachable
ya que como antes se mencionó un docente se convierten en un modelo a seguir y
es importante dar una buena impresión.
El docente del siglo XXI se debe caracterizar por su
compromiso por su profesión, con la capacitación constante, sus ansias de superación
permanentes y con el aprendizaje de sus alumnos. Un docente se debe convertir en
un investigador, es decir siempre debe estar en la búsqueda de soluciones a los
problemas pedagógicos, se debe convertir
en un maestro de la vida, es decir enseñar y aportar valores a los demás, en
donde debe colocar en el centro de su vocación estos valores humanos
comprometido con la integridad académica. Una buena enseñanza necesita de un
buen profesor que ostenten cualidades como: responsabilidad, flexibilidad,
preocupación, compasión, cooperativismo, creatividad, dedicación, decisión,
empatía y ser cautivador.
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